Ruta por los Palacios abulenses

   Sabemos que una de las cosas que hacen destacar la ciudad abulense es la gran cantidad de elementos históricos que se han conservado, sobre todo destacan aquellos de época medieval y renacentista; paseando por las calles de su centro histórico nos encontramos con ellos perfectamente integrados en el urbanismo actual. Así pues, una de las formas más interesantes de conocer la ciudad de Ávila es definitivamente a través de sus palacios y casas nobles. En este post nos centraremos en estas edificaciones civiles.

CONTEXTO: PERTENENCIA, FUNCIONALIDAD Y UBICACIÓN

    Primero de todo, ¿para qué servian estas edificaciones? pues tenían doble función ya que por un lado, eran las residencias de las familias más influyentes del momento en la ciudad, pero además, eran una herramienta muy potente ya que era una demostración de poder. Hay que destacar que todos los edificios que conservamos actualmente de este estilo se construyen en época renacentista (para ubicarnos en el tiempo: finales del siglo XV-XVI) debido principalmente a que es el momento de máximo poder socioeconómico de la ciudad (OJO: se construyen sobre los anteriores medievales, o se reforman con el nuevo estilo).

    Podemos encontrar representados en estos edificios a las principales familias nobles abulenses: Los Velada, Los Dávila, Los Verdugo, los Águila, los Almanza, Los Sofraga, Los Superunda, Los Serrano, Los Condes de Polentinos, Los Bracamonte o Los Mújica; pero también se realizaban por mandado de una persona en particular, es el caso del Palacio de Valderrábanos que es conocido como “la Casa de Gonzalo Dávila”, el Palacio de Don Juan de Henao (hoy conocido por su posterior propietario, el Marqués de Benavites) o del Palacio Núñez de Vela. También ha varios edificios de este estilo dedicado a la iglesia como es el antiguo Palacio Episcopal o el palacio de los Deanes.

    En total podemos señalar que existen al menos una quincena de ellos. En su mayoría todos ubicados dentro de la muralla pero alguno como es el de Los Serrano, se encuentra a las afueras de la misma. El sentido de esta ubicación se debe a una función defensiva, y es por esto por lo que podemos observar en su arquitectura una forma especial ya que varios de ellos estaban muy cerca o formaban parte la muralla.

ELEMENTOS ARQUITECTÓNICOS GENERALES

    Cada palacio tiene su propia historia pero todos comparten una estructura similar, en general suelen tener dos o más alturas, con forma cuadrangular o rectangular a veces una torre y con un patio interior abierto porticado con columnas y a su alrededor las habitaciones (podría recordarnos a una casa romana). En su puerta siempre tienen el escudo que identifica a la familia a la que pertenecen. Todo esto se debe a que seguían la moda renacentista proveniente de Italia. (OJO: no todos siguen este patrón al milímetro, pueden existir variantes). 

    

      

                                                                                                                          

                                                                                

                                                             

                                                                                          

      

                                                                                                                                               

                                                     

                                                                                    

     

                                                                          

   

SITUACIÓN ACTUAL 

    Dado que la ciudad es un espacio vivo que se va adaptando a la vida de sus habitantes, los edificios también cambian con el paso del tiempo y para que no queden anticuados, se les busca siempre una nueva funcionalidad. Desgraciadamente cuando no se le encuentra ninguna acaban en ruina y desaparecen. Dado que casi todos estos palacios están deshabitados, parece que la solución para conservarlos se haya encontrado en el turismo ya que que el 90% de estos espacios se han reconvertido en hoteles o lugares de restauración dedicados a este sector (también se hacen rutas turísticas). Ahora bien, esta “solución” tiene su parte negativa porque actualmente en el mundo globalizado en el que vivimos, todo parece haberse convertido en un espacio para explotar económicamente y la cultura no es menos. 

    El turismo cultural tiene un gran peso en nuestro país y en ciudades patrimoniales como Ávila es el principal recurso económico haciendo que en algunos casos parezcan parques temáticos, como puede observarse claramente en Venecia, donde todo está dedicado a los turistas (los palacios son hoteles…) Cabría preguntarse, ¿es este el futuro que queremos para nuestros edificios históricos? ¿qué otras soluciones se pueden adoptar para protegerlos? Pues bien, con el paso del tiempo se han ido adoptando otras medidas para conservarlos si bien es cierto que algunas con más exito que otras; este es el caso de la reconversión en sedes de la administración o tiendas de ropa, restaurantes...  (como el Primark gigante de Gran Vía o el McDonald’s de Banco de España, ambos Madrid). Esto permite al menos mantener el aspecto externo de los edificios. 

    En el caso abulense, a pesar de que a un gran número de ellos se les ha otorgado una función de hostelería y restauración, también algunos han pasado a ser museos: la casa de los Deanes es el museo provincial, centros de exposición: Palacio de los Serrano o de Superunda, archivos: Palacio de Polentinos, sedes administrativas: Palacio de Bracamonte, Núñez vela… (cabe destacar la rehabilitación que se está realizando en el palacio de los Águila donde se plantea albergar una extensión del Museo del Prado). 

    Considerando pues la gran cantidad de edificios historicos de este tipo que se conservan perfectamente integrados en la ciudad, hay que reconocer que la labor llevada a cabo para su conservación sobre todo en las últimas décadas, ha sido de gran calidad y aunque todo tiene sus luces y sus sombras podemos concluir que gracias a este trabajo hoy en día Ávila goza de una situación patrimonial más que privilegiada y es un gran ejemplo a seguir.